viernes, 21 de agosto de 2015

2/ Arte Contemporáneo en Islandia

No hemos pasado mucho tiempo en Reykjavik, un par de noches, y no teníamos claro si los museos merecerían la pena. Apostamos por probar con el Reykjavik Art Museum.  Tiene 3 sedes pero sólo vimos una, Hafnarhús, un antiguo almacén portuario dedicado ahora al arte contemporáneo. La exposición principal era una historia del arte por Erró, un artista muy interesante medio pop-art, medio cómic, que exponía collages a partir de imágenes de otros pintores (en la foto de abajo un detalle del cuadro de Gauguin). Estuvo bien pero nos impactó mucho más la instalación-performance de Magnús Sigurðarson: un tipo en plan griego cantando a ritmo de órgano en la Iglesia de Hallgrimur (de la que hablé en la entrada anterior) y todo grabado con un dron que sobrevuela la nave (ver vídeo). 

En cualquier caso, lo más memorable, en cuanto a arte contemporáneo islandés se refiere, es el cuadro que nos hemos comprado: esa casa roja con fondo de verdes y azules de abajo. Lo encontramos en una galería del centro, en la calle peatonal dónde se concentra toda la actividad, y fue todo un flechazo. Ahora vamos por ahí con el coche, Islandia arriba, Islandia abajo, fotografiando casas rojas sobre el verde intenso del paisaje.